¿Por qué, aunque hay educación sexual en las escuelas y una ley nacional facilita el acceso a información y métodos anticonceptivos, el número de chicas internadas por complicaciones post aborto se duplicó y el de embarazos adolescentes se mantiene incólume?
La respuesta que halló el Celsam en su más reciente investigación es alarmante: la decisión del cuidado queda en los varones; las chicas no piden ni llevan preservativos, ni toman píldoras, para no ser tildadas de fáciles.
Si esto no es machismo...
Por Luciana Peker
–Si dice que no es porque va a ser una buena novia: una chica ideal no dice que sí en la primera vez.
–Si dice que sí es porque ya es una buena novia: tiene que decir sí recién cuando es la novia de un chico.
–Si tiene ganas de tener sexo con un hombre es porque está enamorada: sólo acepta tener sexo cuando ama a un hombre y no sólo porque desea tener relaciones sexuales.
–Si toma pastillas es porque tiene novio: una buena chica toma pastillas sólo si tiene novio.
–Si es femenina, no usa, no pide, no lleva ni pone preservativos: la adolescente ideal no tiene preservativos en la cartera ni en el bolsillo. No le pide al varón que use preservativos. Espera que el hombre la cuide, lleve él los profilácticos y sea quien decida colocárselos antes de tener sexo.
La mujer ideal descripta no sale de manuales del siglo XIX, de mensajes encriptados de una secta retrógrada ni de un best seller para adoctrinar adolescentes sumisas.
La imagen de la mujer ideal –exactamente opuesta al ideal de una mujer libre, autónoma, gozosa, que se sabe proteger, se respeta y se hace respetar y que tiene derecho a cuidar y disfrutar de su cuerpo– surge de una encuesta entre 50 adolescentes –mujeres y varones– de entre 12 y 19 años, escolarizados y de sectores medios, de la ciudad de Buenos Aires, realizada en septiembre del 2007, por el Centro Latinoamericano Salud y Mujer (Celsam).
“Los prejuicios sobre los roles de género están determinando que las chicas no se cuiden”, enfoca la ginecóloga Alicia Figueroa, integrante del Celsam, sobre la conclusión más fuerte de la investigación ¿Por qué los adolescentes no se cuidan a pesar de conocer los métodos anticonceptivos? “Los tiempos cambiaron: ya no está el mito de la virginidad hasta el casamiento y también es natural que las chicas cambien de parejas”, apunta. Sin embargo, los prejuicios sobre lo que debe ser un varón y lo que debe ser una mujer siguen fuertemente estandarizados, pero con una vida sexual activa.
fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/las12/13-3622-2007-09-29.html
Opinión:
Como de costumbre el artículo es más largo, pero lo medular está acá.
En este blog hemos hablado reiteradas veces acerca de la sexualidad y los derechos que en ella se han ido ganando.
Lamentablemente los prejuicios siguen existiendo.
Los resultados del mencionado estudio arrojan aún el miedo a disfrutar de la sexualidad como un derecho natural del ser humano, miedo que desde luego aún no puede ser desterrado.
El sexo es una necesidad humana que debe ser satisfecha como cualquiera de las otras. El tema es que hay que hacerlo con responsabilidad.
No debe tenerse miedo al que dirán por ejercer un derecho que legítimamente se ha otorgado.
Ejercer ese derecho es necesario, claro que la responsabilidad también.
Un abrazo
Educavent
No hay comentarios:
Publicar un comentario